El tratamiento R4 con sales de cobre se aplica mediante autoclave, logrando una impregnación profunda en la madera. Protege frente a hongos, insectos y humedad, permitiendo su uso en exteriores severos e incluso en contacto directo con el suelo. Es ideal para postes, jardineras, tarimas y estructuras en entornos húmedos. El proceso deja un tono verdoso característico, señal de protección activa. No requiere mantenimiento adicional y prolonga la vida útil de la madera durante décadas.
También puede aplicar lasur, barniz o aceite a mano. El lasur es ideal para exteriores, protege frente a la humedad y rayos UV, y deja transpirar la madera. El barniz crea una capa dura y brillante, más adecuada para interiores y zonas secas. El aceite nutre en profundidad, realza la veta y es perfecto para muebles o superficies de uso frecuente.